( Inspiración Visual XXVI)
Qué triste esta la muchacha…
Es muy linda,
pero la tristeza
afea su cara.
Yo no sé lo que le
pasa…
¿Acaso no sabes su
historia?
Está así por el
dolor que la embarga,
pues ya desde
pequeña
sufría y vivía
amenazas
al igual que otras
niñas.
Aunque no te creas…
también tenían
momentos de juegos y
risas,
pero el llanto era
lo que más abundaba…
Y todo paso aquí en
la aldea.
¿Pero qué paso… dime
ya?
Pues todo paso en
una tarde tranquila
en Septiembre, aunque
el calor aun arreciaba.
De pronto se oyó una petardeada
salió contenta al
igual que otras niñas,
para ver que fiesta acontecía.
No eran petardos… eran
disparos.
Los que los
soldados con pistolas tiraban,
apuntaban, y una y otra vez disparaban…
sin importar a quien
mataban.
Ella aterrada, se
escondió en una cesta,
los disparos no
cesaron, lo menos en una hora.
Y ya de noche cuando
no se oía nada…,
y asomo su cabeza,
aún asustada,
solo pudo ver a la
muerte como recogía
una a una todas las
almas.
La encontraron ahí sentada,
sobre un rio de
sangre,
donde ahora está la
estatua.
No volvió a llorar,
ni a hablar,
se quedó así
como ahora la ves…
Y se dejó llevar por
la melancolía,
hasta el fin de sus
días.
Ángels Martínez - Geli
Noviembre 2013
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