Donde estás…
Te veo sentada y triste,
con la mirada perdida.
Evocando quien sabe que…..
Me pregunto donde estás…
Si vives sin vivir,
y si realmente sientes algo.
La Rutina, la inercia,
se ciernen sobre ti
convirtiéndote en autómata.
La vida y el tiempo,
se cobran factura
y a nadie perdonan.
Te toco a ti, como a otros.
El ser sin saber…
Y el no saber, olvidando.
Quien sabe, si mañana
me verás y no sabrás,
o quizá, ya no te veamos……
Solo sé, que la vida
deja muchas huellas,
y las tuyas son profundas
Vive, aunque ya no sepas.
Porque tu pasión
siempre ha sido la vida.
Enero 2010
Me ha emocionado, pero mucho. Se esconde, se intuye un gran drama existencia en esos versos, y estoy seguro de que se refieren a una personal real. Tú los vas desgranando, como el que no quiere la cosa, pero...
ResponderEliminarUn abrazo, mi estimada Geli o... ¿cómo quieres que te llame?
Francisco, este poema es como lo has percibido, esta dedicado a mi madre y a todos los que como ella padecen de Alzehimer.
ResponderEliminarUn abrazo.